Breve resumen del contexto y del propósito (leer 3:14,15) – para explicar cómo podemos contribuir a la salud de la iglesia.
Veamos otra manera de cómo podemos hacer esto – leer 2:1-10. Es tan fácil enfocarse en 2:4-6 (soteriología importante) o en 2:8,9 (¿los hombres tienen que levantar sus manos?; ¿a las mujeres no se les permite portar joyas?) que perdemos el punto central de este pasaje. El punto central es acerca del ministerio de la oración corporativa de la iglesia –los cristianos juntándose por el propósito específico de orar (en voz alta) juntos.
2:1 utiliza cuatro palabras diferentes para referirse a la oración. 2:8 muestra que Pablo está pensando en los hombres que oran (el “en todo lugar” ¿se refiere a diferentes casas iglesias en Éfeso?) juntos, y 2:9 (“asimismo”) asume que las mujeres también van a orar en contextos de grupo.
Si, la Biblia también enfatiza la importancia de la oración individual y privada (por ej. Mateo 6:6) – pero no es el tema de este pasaje. No, Pablo no se está refiriendo a algún tipo de servicio de adoración, en el cual la oración es una parte. Dichas reuniones no están ni descritas ni prescritas en el NT.
Veamos lo que Pablo enseña aquí con respecto a este tipo de oración y la razón de su importancia, a quién debemos orar, y cómo debemos orar juntos.
Cuando Pablo dijo “ante todo”, no significa primero en el orden (es decir comienza la reunión primero con oración); él quiso decir en cuanto a la importancia. Ya sea que esté diciendo que la oración corporativa es siempre la número uno en cuanto a prioridad para la salud de cada iglesia, o que Timoteo debía priorizar la oración corporativa para liderar la iglesia de Éfeso de vuelta a la salud, esta frase enfatiza que este tipo de oración es crucialmente importante para la salud de la iglesia. ¿La razón?
Jesús mismo enfatizó que Él responderá las oraciones ofrecidas en este contexto (leer Mateo 18:19,20). “Estar de acuerdo” (symphoneo) en el contexto se refiere a los cristianos que están de acuerdo (en voz alta) juntos para hacer sus peticiones en respuesta a la presencia viviente de Jesús y su guía. Podemos discernir más efectivamente Su voluntad y pedirla juntos.
Jesús prometió a Sus discípulos que Él daría cualquier provisión del Espíritu Santo que ellos necesiten para llevar a cabo su misión (leer Lucas 11:9-11,13). El mismo autor (Lucas) narra el inicio del cumplimiento de esta promesa en su saga (Hechos) – casi exclusivamente como una respuesta al grupo de oración (por ej. Hechos 1:14 >> 2:1 hasta el final; 4:24-31; 12:5 al final; la oración corporativa es mencionada 12 veces en los primeros 13 capítulos).
Por esta razón decimos a menudo: “todo ministerio genuino nace, se sostiene, y avanza a través de la oración – especialmente la oración corporativa.” En adición, la oración de grupo tiene una serie de otros maravillosos beneficios. Experimentamos una unidad más profunda (personalmente y misionalmente) cuando oramos juntos. Participamos como equipo cuando oramos juntos. Vemos más destellos de lo que Dios está haciendo entre y a través nuestro en la medida que oramos juntos. Dios a veces obra en nuestros corazones de una manera especial en este contexto (MI PRIMERA VEZ; PERSPECTIVAS NO RELACIONADAS). Tendremos la tendencia a ser más consistentes en nuestras oraciones privadas cuando oramos por los demás en forma regular. Y somos refrescados y edificados espiritualmente a medida que oramos juntos (entra cojeando y sale bailando)
No es de extrañarse que Spurgeon le dijo a los líderes de iglesia: “Las reuniones de oración son la maquinaria que impulsa la iglesia…Mantengan las reuniones de oración, cualquier otra cosa puede decaer… si yo fuera Uds., haría la reunión de oración un evento especial de mi ministerio…” (Describe sus reuniones como “salas de maquinarias”). Es por esto que no debiera sorprendernos que los movimientos poderosos (misiones, plantación de iglesias, evangelismo, etc.) normalmente comienzan con pocos miembros comprometidos a orar juntos (por ej. MOVIMIENTO DE HAY-STACK).
Re-leer 2:1. Nuestra oración corporativa no debiera estar primeramente enfocada en nosotros (la oración privada tiene más de esto), sino más bien hacia los demás (“en representación de”). Y nuestro grupo de oración no debiera ser estrecho, sino generalizado (“por todas las personas”).
En otros lugares, Pablo enfatiza la oración para todos los cristianos (leer Efesios 6:18).
Pero aquí él enfatiza orar por las personas que aún no conocen a Jesús como Señor (releer 2:3-6 y explica la implicación). Dios desea que ellos lleguen a conocerle, y nuestras oraciones liberan Su influencia atractiva y la convicción para ellos. Él también responde nuestra oración para tener oportunidades para compartir de Cristo con los demás (Colosenses 4:3,4).
EVANGELIO: Dios quiere que tú seas salvo; Él quiere que tú llegues al conocimiento de la verdad; Jesús se dio a Sí mismo como el rescate para ti; ¡Él te está hablando a ti en este momento! No pierdas de vista esto – ¡tienes una oferta sobre la mesa para ti! Y cuando tú respondes, una de las grandes cosas que ocurren es que el relacionarse con Dios se vuelve personal.
Pablo entrega una exhortación específica para orar por las autoridades civiles (releer 2:2). ¿Por qué? Porque esto les ayudará a hacer su trabajo de preservar la paz social y el orden (Romanos 13:1 al final). Y debido a que cuando hacen sus trabajos efectivamente, el evangelio se puede expandir más fácilmente (“Pax Romana” como un factor clave en la expansión del 1er siglo; contra “el evangelio se expande más rápidamente cuando la iglesia está bajo persecución”). Cuando Pablo dio esta exhortación, la Roma pagana estaba en el poder, Nero era el emperador – y ¡los oficiales romanos recién lo habían mantenido durante cuatro años injustamente en prisión! Esto no es alguna frase sobre espiritual — ¡Pablo creía que nuestras oraciones por las autoridades civiles hacían una diferencia para el avance del evangelio!
¿Cómo crees tú que Pablo respondería a los cristianos evangélicos norteamericanos que son tan apasionados con respecto a sus visiones políticas y con respecto a quién está en el gobierno? Creo que les preguntaría: “¿Oras por ellos tan a menudo como los criticas? ¿Eres tan apasionado por la salvación de tus vecinos como lo eres con tus visiones políticas?”
Habiendo considerado la razón de la importancia de orar juntos, y por quién debemos orar, consideremos lo que los pasajes enseñan a cerca de cómo hemos de orar juntos…
Antes que todo, debiéramos orar juntos consistentemente. 2:1 implica esto al usar el tiempo presente (“se hagan”). Claramente, Pablo no está exhortándolos a tener un día especial de oración, sino más bien un ministerio de oración continuo. Como vimos anteriormente, la iglesia en el libro de Hechos modela esto. Pasajes como Colosenses 4:2 (“dedíquense a la oración”) se refiere (si no exclusivamente, entonces inclusivamente) al compromiso regular de la oración corporativa.
A un nivel de sentido común, cualquier cosa que sea realmente una prioridad debe ser calendarizada. De hecho, nuestro horario revela cuáles son nuestras verdaderas prioridades. Si realmente creemos que la oración corporativa es tan importante como la Biblia dice que es, nos haremos un regularmente un tiempo para esto.
En nuestra iglesia, facilitamos esto al tener reuniones de oración de iglesia (normalmente ante o después de otra reunión; 30 minutos a 1 hora). Algunas de nuestras esferas también tienen conciertos de oración mensuales (EXPLICAR EL FORMATO). Otras formas más pequeñas “bolsillos de oración”, 3-4 personas se juntan semanalmente para este propósito. Yo supongo que incluso un egroup (grupo electrónico) o un grupo de texto (por ej. Las mamas de niños pequeños) es Bueno – si los miembros involucrados están comprometidos a orar por las personas. Para aquellos que no les gusta ninguna de estas opciones, ¡den una idea! De otra manera, como dijo Moody a cerca de otra prioridad espiritual (evangelismo), “me gusta más como yo lo hago que como tú no lo haces.”
Segundo, debiéramos orar juntos con una mente alerta (leer Colosenses 4:2). Debiéramos intentar ir a la reunión ya en el Espíritu, listo para orar. Debiéramos preguntarle a Dios para que nos ayude a no desviarnos, sino que a concentrarnos. Debiéramos escuchar cuidadosamente a los demás cuando oran, y orar silenciosamente con ellos, y verbalmente afirmar a aquellas oraciones que son bíblicas (“amén” – ver 1Cor.14:16). En la medida que el Señor pone algo o a alguien en los corazones de las personas para que oren por eso, debiéramos decir esta oración en voz alta para que todos la puedan escuchar.
Tercero, debiéramos orar juntos en unidad los unos con los otros, más que separados los unos de los otros. Re leer 2:8. El punto no es que los hombres debieran levantar las manos cuando oran, tampoco que simplemente no debieran pelear durante la reunión de oración. Sino que debieran orar con corazones devotos – específicamente, con corazones que están libres de resentimientos acumulados, copucha, y feas peleas. Es hipócrita orar juntos con personas que tú odias (leer Mateo 5:23,24)—es mejor reconciliarse, y luego venir a la oración. Esto aflige al Espíritu e impide que nos lidere en oración (Efesios 4:30). Puede que Dios no responda nuestras oraciones hasta que cambiemos nuestra actitud entre nosotros. (1Pedro 3:7).
Cuarto, debiéramos hacer que este tiempo de oración sea para Dios y primariamente hacia los demás, no para atraer atención a nosotros mismos. Re leer 2:9,10. El punto no es que las mujeres no puedan usar joyas o tengan que llevar ropas decentes en las reuniones de oración. El punto es que ellas no debieran hacer que las reuniones sean para la moda o para coquetear con los hombres. Otras aplicaciones de este principio incluyen:
No ores primariamente a cerca de tus propios problemas, necesidades, etc. Derrama todo esto libremente en privado con tu Padre, pero recuerda que la oración corporativa es para intercesión y agradecimiento.
No seas un distractor al hablar, revisar tu celular, siendo “ruidoso” en el silencio, etc.
No ores largas oraciones. Intenta ser conciso al igual que personal y espontáneo. Si tienes la tendencia a ser interminable, es mejor errar en ser demasiado breve. ¡Es mejor muchas oraciones cortas que pocos monólogos eternos! Puede que tengamos que amonestarnos en esto entre nosotros, como aconseja Spurgeon: “No dudes en decirle al buen “Sr. Cachiporra” que, Dios ayudándote, no debiera orar por 25 minutos. Sinceramente desafíalo a hacerla corta, y si no lo hace, entonces detenlo. Si un hombre entrara en mi casa con la intención de cortarle la garganta a mi esposa, razonaría con él en cuanto a lo erróneo de esto, y luego efectivamente le impediría que hiciese cualquier daño a mi esposa; y amo a la iglesia tanto como amo a mi querida esposa. Así que, si un hombre ora muy largo, puede orar largo en cualquier otra parte, pero no en la reunión en la cual yo estoy presidiendo.”
En la medida que cerramos, este es un buen tiempo para preguntarte a ti mismo una pregunta muy práctica: “¿Cómo puedo hacer que mi participación en las reuniones se levante un punto?”
Considera las siguientes posibilidades:
¿Romper la “barrera de la oración corporativa”? Cuando yo era un niño, los jets estaban regularmente rompiendo la barrera del sonido al exceder la velocidad del sonido. Los aviones se encogían y temblaban a medida que se acercaban a esta velocidad. Pero cuando ellos la alcanzaban, había un “boom de sonido”, después del cual ellos volaban suavemente. La mayoría de los cristianos jóvenes se encogen y tiemblan cuando piensan en orar en voz alta con otros cristianos. Parte de esto es nada más que los nervios que vienen con cualquier nuevo paso, pero parte de esto es probablemente también oposición espiritual (“no es importante”; “harás el ridículo”; etc.). Solo puedo decir que esto era un paso clave en mi vida inicial como cristiano – uno que rompió y soltó algo dentro de mi y liberó el Espíritu Santo para asegurarme y empoderarme aún más. ¡Si Dios te está hablando, hazlo hoy/esta semana!
¿Orar más frecuentemente con mi esposa, hijos, y con mis amigos? ¡Podrías maravillarte de cuánto esto puede ayudarte en tu matrimonio! ¡Podrías maravillarte de cuán poderoso regalo es esto para tus hijos! ¡Podrías maravillarte de cuánto profundiza esto tus amistades!
¿Comprometerme con las reuniones de oración de mi iglesia en casa? Casi todas las iglesias en casa en Xenos tienen una reunión de oración regular (normalmente semanal) para orar los unos por los otros, por amigos no cristianos y miembros familiares, otros ministerios, etc. La mayoría son inmediatamente antes o después de otras reuniones calendarizadas. ¿Puedes comprometerte a ya sea semanalmente o semana por medio, entero o parte del tiempo, etc.?
¿Puedes comprometerte a un concierto de oración de una esfera? Algunas de nuestras esferas tienen reuniones mensuales para saber y orar por nuestras iglesias en casa de la misma esfera, equipos de ministerios, equipos de misiones, etc. ¿Pueden hacer turnos si es que están casados?
¿Ayudar a facilitar o liderar la reunión de oración? Tal vez podrías ser el anfitrión (tú o tu iglesia en casa; equipo de ministerio). Tal vez puedes juntar peticiones de oración, respuestas de reportes, organizar el horario, etc. Considera esto especialmente si tienes un don de oración.
¿Batallar en oración corporativa con otros? ¡Los intercesores o guerreros de oración especialmente tienen aquí un rol clave!
